Tras la boda de George Clooney- de 53 años-con la abogada Amal Alamuddin –de 36- este sábado en Venecia, la lista de los solteros más deseados se ha reducido solo a uno: el becario.
Como era de esperar, a la boda solo asistieron 100 personas, “amigos cercanos a la pareja y familiares”, como ha confirmado el representante de Clooney. El bueno de George, ha asegurado aquel, ha destinado a varias ONG la cantidad que habría cobrado por las dos fotos exclusivas de la boda.