Los presupuestos generales de 2015, que el ministro de Hacienda ha calificado como los de la recuperación, dejan atrás a todas aquellas personas que están en situación precaria. A la vista de los mismos, poco más de 1 millón de los más de 5,2 que no tendrán trabajo el año que viene, cobrarán el paro.
En concreto se destinan a dichas prestaciones 25.300 millones- un 15% menos que este 2014– que irán a pagar a 2,6 millones de personas, de las cuales algo menos de 1,2 millones cobrarán el subsidio (de 400 a 450 € mensuales), alrededor de 300.000 se beneficiarán de la renta activa y el resto del subsidio agrario. Esto significa, primero, que la mitad de todos los parados anotados en las oficinas de empleo- exactamente el 51% no cobrarán nada– y, segundo: menos de la mitad de los que cobren lo harán mediante una prestación contributiva- el paro-.
Por si había alguna duda de las ‘intenciones’ de los presupuestos para el año que viene en relación con quienes lo están pasando peor: el famoso Plan Prepara- el de los 400 €- tiene destinado en ellos menos de 286 millones, este 2013 fueron 357 millones; además se congelan las becas en general y, en contra de lo asegurado por el ministro Wert, se reducen las cantidades destinadas a Erasmus; también se reducen las partidas destinadas a Bienestar, pese a que, como ha reconocido el propio Gobierno, hay 1,2 millones más de españoles que han solicitado ayudas o que, de acuerdo con diferentes informes, desde los de la Unión Europea hasta los de Caritas y Unicef indican que 2,3 millones de niños viven en España por debajo del umbral de la pobreza.
Por si estos datos no fuesen suficientes, los recortes siguen en Infancia: este año, el Gobierno ya había reducido esta partida un 14,6%- es decir, más de 770 € por niño- de manera que España invierte en infancia menos que la media europea, un 1,4% del PIB frente al 2,2% de la UE 28, un porcentaje que está solo por detrás del de Grecia.
Eso sí, hay ‘estamentos’ inmunes a los recortes que sufren todos los ciudadanos: el Estado entregará mensualmente a la Iglesia Católica 13,26 millones de euros durante 2015, como adelanto del 0,7 % de la cuota íntegra del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF), por supuesto, esta cantidad sube desde los 158,4 millones de este 2014 a casi 160 de 2015.