En 2014, el Premio Nobel de Medicina se ha entregado al estadounidense-británico John O’Keefe, y al matrimonio de Noruega, Moser, por sus descubrimientos que permiten a las personas orientarse y saber en todo momento dónde se encuentran, anunció la Asamblea Nobel del Instituto Karokinska, en Estocolmo.
El neurocientífico O’Keefe, descubrió en 1971, el primer componente que nos posiciona en el espacio, tras detectar que determinadas células nerviosas en el hipocampo se activan en ciertos lugares, creando un mapa de localizaciones. Estas “células de lugar“, fueron un hallazgo de tal magnitud igual que el demostrado por la pareja Moser. En 2005, el matrimonio dio a conocer la “célula cuadrícula“, generadora de un sistema de coordenadas, concretando la ubicación precisa en un espacio. Ambas células determinan la posición exacta y permiten la navegación de los seres humanos.
En España, solamente dos científicos lograron ser premiados con este galardón: Severo Ochoa en 1959, por sus trabajos sobre el metabolismo de los ácidos nucleicos; y en 1906, Santiago Ramón y Cajal, por su descubrimiento en neurobiología, con la “doctrina de la neurona“.