Con argumentos como ‘ya no lo quiero’ o ‘mi hijo me aburre’, varias familias de EE.UU intercambiaban a los niños adoptados, mediante páginas web con el nombre de “reacomodación“. Este mercado negro, que deambula por Internet tratando a los menores como mercancías, se basaba en adopciones efectuadas en países como Rusia, China, Haití y Etiopía.
La práctica la vivió en primera persona, Nita Dittenber, que en los últimos 4 años vivió en 4 familias, siendo víctima de abusos en la totalidad de los hogares, según informa el medio RT. Uno de sus anteriores padres adoptivos se enfrenta a un delito por 17 casos de violación y agresiones sexuales contra sus hijos.
Se añade a la trágica situación, que no existe ningún organismo del Gobierno que se encargue de controlar el destino de los menores, desconociendo cuántos se encuentran en esta situación. Por el momento, el único estado de EE.UU que ha tomado medidas, es Wisconsin.