Miles de personas han despedido desde distinto lugares de Vigo- el propio Puerto, O Castro, Samil o el Paseo de Alfonso- al descomunal ‘Oasis of the Seas’, que atracó a las 8 de la mañana, con sus 5.000 pasajeros y 2.200 tripulantes abordo.
Hacía 22 días que este gigante de 362 metros de eslora, y 65 de manga, que desplaza 200.000 toneladas de registro bruto, había estado en Vigo. Hoy ha llegado procedente de Southampton y, después de 12 horas aquí ha zarpado con rumbo Fort Lauderdale, en Florida.
Esta última escala en Europa, la ha hecho tras pasar por un astillero de Rotterdam para realizarle distintas reparaciones, desde los sistemas de seguridad, la limpieza y pintado del casco, pasando por la revisión de los sistemas estabilizadores, hasta la colocación de nuevos elementos ornamentales y un cambio de mobiliario.
Muchos de sus pasajeros aprovecharon para bajar y pasearse por Vigo, moviéndose entre los miles de vecinos que se han acercado hasta la zona del Náutico para volver a ver a ver a este impresionante trasatlántico que cabría justo en Príncipe. Muchos de nuestros visitantes, la mayoría procedentes de Texas, no sabían que en la ciudad se habían organizado varios actos para darles la bienvenida, y otros tantos aprovecharon la escala para desplazarse a otros lugares: Santiago, Baiona, Pontevedra e incluso Oporto y Lisboa.
A las 8 de la tarde, en punto, el ‘Oasis of the seas’, empezaba a alejarse del muelle de trasatlánticos, con sus pasajeros diciendo adiós con las pantallas de sus móviles encendidas o sacando las últimas fotografías. En pocos minutos, surcó la Ría y se perdió entre las Cíes.