En Francia, ciudadanos disfrazados de payasos han extendido el miedo por las calles. La inocente broma de un joven, el pasado 10 de octubre, caracterizado de payaso con un cuchillo de plástico, ha evolucionado en amenazas y agresiones, en algunas ocasiones portando armas, en concreto en el sur del estado.
En la ciudad de Montpellier, un hombre fue golpeado con una barra metálica, hasta 30 veces por un desconocido que estaba disfrazado, mientras dos individuos a mayores le robaban. El 24 de octubre, los agentes comunicaron que un arma en la vía pública “es un delito castigado con penas de prisión“, solicitando la colaboración ciudadana para que denuncien las actividades delictivas.
Para defenderse, han surgido grupos de ciudadanos que organizan patrullas con cuchillos y bates en zonas como Burdeos para dar “caza a los payasos“, según informa el medio Le Monde. Una histeria colectiva que coincidirá con la noche de Halloween este viernes, 31 de octubre.