Belén Martín ha iniciado una huelga de hambre indefinida en la puerta del hospital madrileño Ramón y Cajal para exigir al Gobierno que le proporcione a su marido los medicamentos necesarios para la hepatitis C, que debía haber recibido a principios de octubre, ya que se encuentra en la última fase de la enfermedad, antes de meterle en lista de espera para un trasplante de hígado.
Belén ha explicado a los periodistas que tomó esta decisión tras la “indignación” que le produjo escuchar a la ministra de Sanidad, Ana Mato, que “los enfermos están tomando el medicamento con total normalidad”, situación que “no es cierta”, según ha asegurado la mujer de Saturnino.
Según ha recalcado, el Ministerio de Sanidad les prometió el tratamiento a principios de octubre. Sin embargo, ha pasado mes y medio de la fecha y Saturnino no ha recibido aún la autorización formal por parte de Sanidad.
Belén ha repetido que su principal objetivo es conseguir el tratamiento de su marido antes de que tenga que ponerse en lista de espera para un trasplante de hígado, pero que además lo hace por todas aquellas personas que tienen la misma enfermedad. “Mueren 11 personas diarias y nadie dice nada se tienen que dar cuenta de que no somos cifras, no somos papeles…muchos enfermos con familias que están sufriendo”, quien ha recordado que hay 300.000 enfermos de Hepatitis C diagnosticados en España.
Saturnino Cobo, ha explicado que se encuentra en la fase F4, es decir, “el último grado de la enfermedad con fibrosis”. Si no recibe el tratamiento indicado por sus médicos, dentro de tres meses, como máximo, se descompensará su hígado y tendrá que someterse a un trasplante para sobrevivir.