Como ya es tradicional, en vigoalminuto nos tomamos el día de Navidad libre. El becario ya ha cogido el Transiberiano- que tarda 7 horas menos en hacer los 9.228 kilómetros de Moscú a Vladivostok, que el tren-hotel en ir de Vigo a Madrid- y que llegará a su casa este mismo año. Por ello, al frente de la redacción se queda, por si pasase algo noticiable, el palo de la escoba, vestido con un traje de Armari, que compramos en La Piedra para mandar al becario al Festival de Cans (criaturita, que ilusionado estaba) antes de que cerrasen sus 36 negocios, cuando las fuerzas del orden descubrieron-tras 56 años de investigaciones- que los Lewbis que se vendían allí por 20 €, no eran los fabricados en San Francisco; un poster de Los Chichos, para que parezca que hay más ambiente, y el dispositivo de una muñeca que dice “hola ¿quieres jugar conmigo?”, y que hace las veces de alarma.
Aunque nos hemos ido sin decirnos unos a otros a dónde, sí nos pusimos de acuerdo, durante la tradicional cena de navideña, que siempre hacemos en la acera del Papo’s, para agradeceros que nos hayáis seguido todos estos años. Ha sido esta confianza la que nos ha dado el vigor- ¡eh, véase cómo usamos una palabra que recuerda a Vigo!- para intentar informar con imparcialidad, rapidez y veracidad.
Decía Ben Bradlee- que dirigió el Washington Post durante años, incluidos los del Watergate- “uno de los placeres del periodismo es que nunca sabes de qué vas a escribir cuando vas al trabajo”: de eso disfrutamos a diario y la satisfacción es aún mayor porque ejercemos en la era de Internet, que ha hecho de las personas y de sus problemas el centro de la información.
En vigoalminuto teníamos ese objetivo. No nos interesa la actualidad política sino las consecuencias que las decisiones de los responsables públicos tienen en todos nosotros. Y ahora, como nunca antes, se conocen esas consecuencias, pueden compartirse, rechazarse, combatirse y, sobre todo, cambiarse.
Esperamos estar aquí cuando vosotros impulséis esos cambios…y contarlos…también cuando compartáis nuestro trabajo y lo combatáis…y confiamos en ser capaces de irnos y dejarles el sitio a otros cuando lo rechacéis…porque será cuando ya no estemos haciendo lo que vinimos a hacer aquí: contar la verdad.
Un abrazo a todos. 40.070 gracias.