Agentes de la UMIR, de la Policía Local, buscan, desde este lunes, a una tortuga que ha desaparecido de la casa de sus dueños, en Matamá.
En este caso, no será necesaria una persecución a toda velocidad, aunque sí hay que tener cuidado si se la ve puesto que, este ejemplar de Chelydra Serpentina, de unos 30 centímetros de longitud y 5 kilos de peso, aunque no es que tenga reflejos felinos, puede resultar agresivo e incluso provocar lesiones en caso de mordedura.
El animal se encuentra en tratamiento veterinario debido a una enfermedad en su caparazón y necesita ser controlado diariamente. La patrulla realizó vigilancia en todas las zonas limítrofes, además de preguntar a los vecinos, sin que a día de hoy el animal fuese localizado.