Javier Fernández, que fue batería del grupo vigués ‘Los Piratas’, ha muerto tras recibir un disparo de un agente de la Guardia Civil. Según fuentes del instituto armado, la patrulla se presentó en la casa en la que vivía el fallecido con su mujer y un bebé después de que una llamada alertase al puesto de Ponteareas de que un hombre estaba agrediendo a su pareja.
Al llegar al lugar, los agentes encontraron al fallecido en una actitud “muy violenta”, tanto que delante de los agentes agredió a la mujer y la obligó a entrar en la casa. Una vez dentro la mujer logró escapar, aunque dentro quedó el supuesto agresor y el bebé, por lo cual los agentes entraron para intentar convencer al hombre de que depusiese su actitud.
En lugar de hacerlo, según las mencionadas fuentes de la Guardia Civil, cogió al niño por los pies y amenazó con matarlo y, acto seguido, intentó apuñalar a uno de los agentes, por lo cual el otro agente, para evitar que pudiese hacerlo, hizo un “disparo intimidatorio” a una zona no vital del cuerpo del presunto agresor.
Herido, fue trasladado al Hospital del Meixoeiro donde ingresó en estado estable aunque, a las pocas horas falleció.