La rotura de una cañería de aguas fecales en Urgencias del Hospital Álvaro Cunqueiro, ha causado una inundación este martes por la tarde. La conducción, según denuncian los trabajadores, se ha roto a causa de la presión que sufre toda la instalación de todo el hospital y que, en los últimos días, ha obligado a intervenir a una empresa para “bombear” las conducciones “que no pueden con todos los residuos que se generan en el edificio”.
Además de ello, los problemas en el nuevo hospital no acaban. Esta misma semana, un paciente de oncología denunció que había un gusano en su sopa de verduras. El enfermo hizo una fotografía del mismo y denunció el hecho a los responsables del servicio y al personal sanitario.