Hace menos de un mes, el ministro de Hacienda y Administraciones Públicas, aseguraba, como el presidente Rajoy, que España cumpliría con el objetivo de déficit público marcado por la Comisión Europea, un 4,2% para todo este año. Ambos, además del ministro de Economía, Luis De Guindos, negaban, así las palabras de Pierre Moscovici, comisario europeo de Asuntos Económicos y Financieros, que advertía del incumplimiento español.
Este lunes, el presidente del Eurogrupo, Jeroen Dijsselbloem, ha confirmado que será así y, de paso, como ya hizo antes de las Elecciones en Grecia, también trata de influir en las mismas. Dijsselbloem-un funcionario que no ha sido elegido por los ciudadanos- ha declarado que el nuevo gobierno español que se constituya después del 20 de diciembre tendrá que aplicar reformas y recortes en sus presupuestos generales.
El mes pasado, el Gobierno de Rajoy presentó el borrador de sus Presupuestos Generales del Estado para 2016 en Bruselas y la Comisión Europea ya le advirtió de que corría el riesgo de incumplir las reglas de consolidación fiscal de la eurozona porque sus previsiones, mucho más optimistas que las de Bruselas y el FMI, no tenían en cuenta la exposición de España a las economías emergentes.
“El gobierno español no adoptará ninguna medida. Esta tarea se dejará al próximo gobierno que, si fuese necesario, tomará las medidas necesarias para garantizar que el presupuesto cumpla con las reglas”, dijo Dijsselbloem en una rueda de prensa tras una reunión del Eurogrupo.
Hay que recordar quién es Dijsselbloem: tras el referéndum y las elecciones griegas de este mismo año advirtió que el Gobierno heleno tenía que aprobar y reformar varias leyes, acometer “duras reformas en materia laboral, en pensiones, IVA e impuestos”, y aprobar medias “también muy duras” en cuanto a privatizaciones “y ya veremos”. Lo que pasó después de eso ya es conocido: el primer ministro Tsipras hizo lo que prometió a los griegos que no haría: redujo las pensiones, subió el IVA y aumentó las privatizaciones, incluida la de los transportes o la del puerto de el Pireo.