“Abel Caballero pasará a la historia como el alcalde que más daño ha hecho a esta ciudad”. Esta frase resume la impresión que tiene el grupo municipal del Partido Popular sobre la anulación por parte del Tribunal Supremo del Plan de Ordenación Municipal (PXOM) de Vigo.
La portavoz popular en el Concello culpó, directamente, al alcalde de esta circunstancia y le exigió que “pida perdón a los ciudadanos y dimita, porque, al ser el causante de este desastre no está legitimado para seguir en su puesto”.
Elena Muñoz recordó que, en 2006, cuando Corina Porro ocupaba la Alcaldía había conseguido un consenso general sobre el PXOM, “con todos los grupos a excepción del PSOE” y que fue Caballero, entonces candidato a las Elecciones Municipales de 2007, quien consiguió que el Gobierno de Galicia, ocupado por su partido y por el BNG paralizase la aprobación de la “excepcionalidad, permitida por la ley, de evitar que, debido a la urgencia para la aprobación del Plan Xeral, que se sometiese a la aprobación medioambiental”.
Cuando Caballero llegó a la Alcaldía “rompió ese consenso, introdujo modificaciones muy importantes en el Plan y no lo aprobó hasta 2008”, acabando con la excepcionalidad que permitía que no se cumplimentase el trámite del informe medioambiental, indicó Muñoz.
La portavoz popular exhibió una fotografía en la que el alcalde brinda por la aprobación del Plan Xeral y recordó que, entonces, “alardeaba de la seguridad jurídica del mismo…pues bien, ahora nos ha metido en el mayor caos urbanístico de la historia de Vigo…esa champán con el que brindaba Caballero van a pagarlo muy caro los vecinos de Vigo”.
Elena Muñoz aseguró que tras la sentencia del Tribunal Supremo “quedan anuladas, entre otras actuaciones, la ampliación del polígono de Balaídos, lo que afectará a Citroën y, por tanto, a puestos de trabajo, también las actuaciones en la Ciudad de la Justicia, el Parque Tecnolóxico, el túnel de Julián Estévez, Praza de España, la Panificadora, los planes de viviendas protegidas o el desarrollo de Navia” y reiteró que Caballero “no puede resolver este problema, tampoco la primera teniente de alcalde [y presidenta de la Diputación] Carmela Silva y la actual concejala de Urbanismo, entonces conselleira de Política Territorial, María José Caride”.
Por su parte, Chema Figueroa, que en 2006 era concelleiro de Urbanismo en el gobierno de Corina Porro, recalcó que el Supremo anula el Plan Xeral porque se tardan dos años, de 2006 a 2008, en aprobarlo, con lo cual no permite aplicar la excepcionalidad de no tener que presentar el informe ambiental.
Figueroa recordo que fue el entonces conselleiro de Medio Ambiente, Pachi Vázquez, quien decidió no tramitarlo, “siguiendo órdenes de Abel Caballero, que ya era alcaldable de que el plan no siguiese adelante porque estábamos cerca de las Elecciones Municipales y llevaba en su programa que el Plan Xeral recogiese un 40% de vivienda protegida”.
“Ahora, con este fraude y con su chulería, Caballero nos lleva al Plan del Clan del 93, el de Príncipe y Vilariño, que él había criticado y demuestra que es igual, o peor, que los socialistas de entonces”.