El Pleno del Concello ha aprobado, con los votos del grupo municipal socialista- que tiene mayoría absoluta de 17 concelleiros- los presupuestos municipales para el año que viene, que ascienden a 226 millons de euros.
El debate y la aprobación se hicieron en medio de las protestas constantes de los vendedores ambulantes, que llevan mes y medio sin poder trabajar tras la suspensión de los mercadillos de Bouzas y de Coia, que no dejaron de gritar durante toda la sesión increpando al alcalde y el gobierno local.
Por su parte, en lo que se refiere a las cuentas, el Partido Popular y A Marea, recriminaron al gobierno presidido por Abel Caballero que no aplazase la aprobación de las cuentas tras la anulación del Plan Xeral de Ordenación Municipal (PXOM), por parte del Tribunal Supremo. La oposición entendía que deberían revisarse los ingresos que va a tener el Concello por el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI)-la popular ‘contribución’- y las licencias de obra y de edificación que, insistieron, deberán revisarse tras la anulación del Plan Xeal de 2008 y la vuelta al de 1993.