Los doctores Jesús Araujo, Manuel Núñez, Mercedes Santos y Luis Alba, en representación de los 298 médicos que han firmado la carta dirigida al presidente del Gobierno de Galicia, al conselleiro de Sanidade y al gerente del Área Sanitaria de Vigo, advirtiendo de las deficiencias del Hospital Álvaro Cunqueiro, han sido tremendamente duros con el funcionamiento del nuevo centro.
Los cuatro han asegurado que tanto ellos como la mayoría del personal del hospital estas “avergonzados” por la situación del Cunqueiro que no ha mejorado “en nada” la situación sanitaria del Área de Vigo, sino todo lo contrario, han asegurado.
Han criticado que se ha construido en base a mentiras, con una reducción considerable en el número de camas sobre las inicialmente previsto; también han señalado que no ha cumplido con su anunciado ‘carácter unificador’ de la atención sanitaria; han vuelto a denunciar que carece de Laboratorio Central, lo cual está retrasando las pruebas; el traslado al mismo se ha realizado sin contar con el personal, “teniendo que llevar material en nuestros propios coches” y con la connivencia de los jefes de servicio, que “firmaron un cheque en blanco” al gerente, Félix Ruibal, al que acusaron de “prepotente”, de actuar favoreciendo la sanidad privada y cuya dimisión volvieron a pedir durante su comparecencia ante la prensa.
Los cuatro médicos han asegurado que la lista de espera estructural para cirugía para el Área de Vigo, cifrada por el Servizo Galego en 7.350 pacientes es de más del doble de personas a causa de la falta de medios materiales y, sobre todo, humanos. A su juicio, el Cunqueiro, además, adolece de mala planificación y graves defectos estructurales, como pone de manifiesto la constante suspensión de operaciones, dado que sólo funcionan, regularmente, 15 de los 20 quirófanos disponibles y sigue habiendo deficiencias en la esterilización del material quirúrgico.
Sobre el motivo por el cual habían esperado seis meses, los que han pasado desde la puesta en funcionamiento del Cunqueiro, para denunciar esta situación, los doctores Araujo, Núñez, Santos y Alba, han indicado que han decidido hacerlo como “llamada de alerta” ante una situación que califican de insostenible y porque es imprescindible para los enfermos que el hospital funcione puesto que, en este tiempo “todo sigue igual y no vemos soluciones”.
A este respecto han recalcado que el hecho de que solo 300 de los 600 médicos del Área Sanitaria hayan firmado esta carta se debe, por un lado, al miedo a las represalias que podrían sufrir muchos de ellos, que no tienen su puesto de trabajo garantizado y, por otro, por los “importantes intereses privados” que protegen una parte de sus compañeros.