Las inundaciones en Alemania y Francia por las lluvias torrenciales están dejando numerosos daños materiales, valorados en cientos de millones de euros, y ya se ha cobrado la vida de 12 personas.
La última estampa que ha dejado ha sido la de los museos del Louvre y de Orsay evacuando las obras de arte situadas en las plantas más bajas de sus instalaciones para evitar que el agua las dañe. Sólo en el Louvre hay unas 250.000 obras situadas en zonas potencialmente inundables del edificio que serán trasladadas a las partes altas.
Ubicados a ambos lados del río, la crecida del Sena amenaza con llegar a los famosos museos franceses, ya que en las últimas horas el nivel ya ha superado los 5 metros. Varios museos, entre ellos el Louvre o la Biblioteca Nacional de Francia, han tenido que cerrar sus puertas.
La famosa estatua del soldado napoleónico de Zouave sirve de barómetro: construida a ras del nivel normal del río, en este momento tiene la mitad del cuerpo sumergido.
