Comer con moderación, una buena copa de vino al día y mantenerse lejos de las mujeres. Ese ha sido el truco de Paulus y Pieter Langerock para llegar a los 103 años y convertirse en los gemelos más longevos del mundo.
Estos hermanos aseguran que pocas veces se han separado desde que vinieron al mundo el 8 de julio de 1913. Magistrados ambos, viven en Bélgica en una residencia desde que la enfermera que les atendía en casa se jubilara hace tres años.
Y nunca pensaron que llegarían a soplar tantas velas: cuando tenían 85 años su médico les dijo que nunca llegarían a los 100.
Ahora el objetivo es batir el récord de Glen y Dale Moyer, que consiguieron vivir hasta los 105 años.