Jornada llena de incidencias en las playas gallegas a causa de las fuertes corrientes, en la que cinco personas tuvieron problemas para salir del auga en las playas de Lapamán, en Bueu, y de Esteiro, en Mañón.
Sobre las 20.00 horas, los socorristas de la playa de Lapamán tuvieron que rescatar a cuatro bañistas que eran incapaces de llegar a la orilla del arenal. Por fortuna, al sacarlos del agua todos estaban en perfecto estado, por lo que no necesitaron asistencia sanitaria.
Por otro lado, una embarcación de rescate de Salvamento Marítimo, la Salvamar Regulos, tuvo que acudir a la playa de Esteiro, en el municipio coruñés de Mañón, para socorrer a un bañista que estaba siendo arrastrado por la corriente. Sin embargo, el bañista al final pudo alcanzar unas rocas, donde fue recogido por unos surfistas que lo devolvieron a tierra.
Por último, sobre las 22.00 horas, un pescador cayó al agua en la playa de Baroña, en Porto do Son. Antes de conseguir subirse de nuevo a las rocas, el hombre se golpeó varias veces, por lo que necesitó asistencia sanitaria en el mismo lugar del accidente.
