Esta frase de Carmela Silva resume su visión de lo que ha sido la gestión del gobierno de coalición entre PSOE y BNG al frente del organismo provincial en su primer año, que se cumple este domingo, día 17, pero que ambos partidos han adelantado al viernes.
“Avanzamos con decisión”, con este lema y en el Pazo de Mendoza, sede de Turismo Rías Baixas, Carmela Silva y el vicepresidente de la Diputación, el nacionalista César Mosquera, junto con los alcaldesas y alcaldes de la provincia, entre ellos los de Pontevedra, Miguel Anxo Fernández Lores, Vigo, Abel Caballero o la regidora do Porriño Eva García de la Torre, acompañados por funcionarios y trabajadores del organismo provincial y ciudadanos, explicaron lo que ha sido este año pasado subrayando que se ha acercado la Diputación a los concellos de la provincia y que se ha cambiado la manera de gestionar que durante 35 años había establecido el Partido Popular.
Carmela Silva, la primera mujer que preside la institución en toda su historia, enfatizó que “esta es una Diputación nueva y venimos aquí a rendir cuentas, ante el conjunto de la ciudadanía”, y reivindicó el haber cumplido con sus promesas, empezando por una “transparencia total y absoluta”.
La presidenta señaló que en este año, además de “hacer política para una sociedad más justa”, se ha completado un “cambio radical del clientelismo, el caciquismo y el sectarismo”, porque, continuó, “ahora la Diputación es un espacio en donde se toman decisiones concertadas con los concellos”, incluso a algunos, afirmó, que nunca habían recibido la visita de la presidencia de la Diputación.
La socialista quiso valorar la apuesta de su gobierno por el empleo, la economía, la sociedad y, sobre todo, por la igualdad y “la lucha contra esta lacra que es el terrorismo contra la mujer”.