La Comisión Europea (CE) ha instado a España, el mismo día en el que empieza el debate de investidura de Mariano Rajoy, que podría ser presidente el domingo, gracias a la abstención del PSOE, a que presente, en cuanto haya un nuevo Gobierno, un presupuesto completo que incluya medidas para que el país cumpla en 2017 con su objetivo de reducir el déficit público al 3,1 % del PIB.
La carta, firmada por el vicepresidente de la CE para el Euro, Valdis Dombrovskis, y el comisario de Asuntos Económicos y Financieros, Pierre Moscovici, se recuerda que las cuentas remitidas a Bruselas por el Gobierno español no incluyen nuevas medidas presupuestarias- hay que recordar que el Gobierno en funciones no puede hacerlo-.
Sin embargo, pese a ello, ambos advierten de que aunque el Ejecutivo presidido por Rajoy prevé cumplir con el objetivo de reducción del déficit para este año bajándolo dos décimas por debajo del 4,6 % comprometido, en el próximo ejercicio el desvío se quedará medio punto por encima de lo deseado, en un 3,6 %…y ese medio punto supone, en realidad, 5.000 millones de euros, algo menos de un billón de las desaparecidas pesetas.
Además de ello, las autoridades comunitarias, recuerdan que España tampoco ha asegurado que se cumpla con el esfuerzo fiscal recomendado por la UE, “esto podría suponer riesgos para la corrección a tiempo del déficit excesivo para 2018″, por lo cual España debe reducir su desvío por debajo del límite del 3 % del Producto Interior Bruto (PIB).
Hay que recordar que, hasta la fecha, el Gobierno Rajoy ha completado todos los recortes que ha exigido la UE, además finaliza su gestión con la deuda pública más alta en los últimos 115 años, con más de un 90% de contratos laborales temporales, con menos del 60% de la reserva en la caja de las pensiones de la que había cuando llegó, tras haber entregado a los 60.000 millones del rescate a la banca que las entidades no han devuelto ni el 5% de los mismos, con el IVA más alto de la historia reciente, con una tasa de pobreza que se acerca al 25% de toda la población española y que, en el caso de los menores de 16 años supera el 30% o con los sueldos medios más bajos de los últimos 5 años.