Cada año se pierden en el mundo 26 millones de maletas de las cuales, al menos, 1 millón no llega a recuperarse nunca. Santiago Álvarez, un ingeniero gallego, ha decidido dar solución a este problema.
Tras dar los primeros pasos en solitario, hace un año buscó la colaboración del Grupo Itelsis. Dicha colaboración ha dado sus frutos tras varios meses de trabajo, mediante la creación de una solución basada en un dispositivo de pequeñas proporciones -apenas 80 x 60 x 15 mm y 100 gramos de peso- que, al incluirlo dentro de la maleta permite saber, cómodamente desde el teléfono móvil del usuario, lo que está sucediendo con su equipaje en todo momento.
Además de dar a conocer la ubicación de la maleta, permite recibir una serie de notificaciones muy interesantes para el usuario, como un aviso en caso extravío o posible abandono, advirtiendo de posibles robos, alerta en situaciones de apertura no autorizada, o simplemente cuando la batería del dispositivo esté a punto de agotarse. Además reconoce los datos del vuelo del usuario alertándolo en caso de que la maleta llegue a un aeropuerto incorrecto.
Wimbag también quiere ir un paso más allá, incluyendo un elemento diferenciador: quieren que sus usuarios puedan gestionar la recuperación del equipaje en caso de pérdida directamente desde la aplicación, evitando de esta forma tener que esperar las interminables colas frente a la ventanilla de reclamaciones en el aeropuerto y evitar así incómodas interrupciones durante el viaje.
Para conseguirlo, están negociando acuerdos con varias aerolíneas y poder integrar la aplicación con sus sistemas de equipaje perdido. La presencia en FITUR les permitirá dar a conocer el producto al gran público y buscar aliados estratégicos en el sector de las agencias de viaje. También esperan poder acercarse a las principales aerolíneas de Asia, Estados Unidos y América Latina, convencidos de que la solución que proponen supone una importante mejora en la gestión del equipaje perdido que se viene haciendo hasta ahora.
