Ángel María Villar, presidente de la Federación Española de Fútbol, ha pagado ya los 300.000€ que fijó el magistrado de la Audiencia Nacional para permitirle abandonar la cárcel de Soto del Real. Su hijo, Gorka, también ha abonado los 150.000€ que, en el mismo concepto, le había impuesto el juez.
Según el auto de prisión, Villar, presidente de Federación desde hace casi 30 años, creó una red corrupta, que englobaba a las federaciones territoriales y a organismos vinculados a ellas, “con la voluntad de enriquecerse y/o favorecer el enriquecimiento de terceros”, de manera que también se garantizaba la mayoría necesaria para ser reelegido.