Las autoridades del estado de Nevada han elevado a 58 muertos y, al menos, 500 heridos las víctimas del tiroteo perpetrado por un francotirador durante un concierto celebrado en Las Vegas.
La masacre ha sido reivindicada por Estado Islámico aunque, de momento, ni las fuerzas de seguridad locales, ni las agencias de investigación estadounidenses han confirmado que se trate de un ataque terrorista.
Hay que recordar que el suceso se produjo alrededor de las 10 de la noche-7 de la mañana hora peninsular-durante un concierto al que asistían alrededor de 22.000 personas, en un lugar situado al Mandalay Bay Casino.
La Policía ha localizado al tirador en el piso número 32 de un hotel y lo ha identificado como Stephen Craig Paddock, de 64 años y residente en Mesquite, en el mismo estado de Nevada. Un equipo de fuerzas especiales entró en la habitación desde la que disparaba y localizó el cuerpo sin vida de este sujeto.
Terrorist attack at Las Vegas??? pic.twitter.com/4Kxo71LXr5
— Khoji (@MunafKalia) October 2, 2017
El sheriff de Las Vegas ha asegurado que en la habitación había más de una decena de fusiles, aunque ha reconocido que aún no ha sido posible saber qué llevó a este hombre a cometer la mayor masacre ocurrida en Estados Unidos desde los atentados del 11 de septiembre de 2001.
Estado Islámico ha reivindicado el ataque afirmando que fue desarrollado por un “soldado” del califato que se convirtió al islam hace sólo unos meses.