El secretario general del PSOE ha prometido este sábado ante el Jefe del Estado el cargo de presidente del Gobierno sobre un ejemplar de la Constitución y sin símbolo religioso alguno, siendo el primer jefe del Ejecutivo que ha pedido que no hubiese ni biblia ni crucifijo en este acto, una opción que, pese a que en España ninguna confesión es oficial, la Jefatura del Estado sólo ha dado a los nuevos presidentes desde 2014.
En la ceremonia, ha estado el ya ex presidente Mariano Rajoy, la presidenta de las Cortes, Ana Pastor, y el ministro de Justicia en funciones, Rafael Catalá, además de otras autoridades.