Las mismas habían sido anticipadas este miércoles pasado por el vicepresidente del Gobierno de Galicia, Alfonso Rueda, quien no dejó pasar la oportunidad de aprovechar este incidente para criticar a otras administraciones, en especial a la Diputación y al Gobierno de España-que aún no ha tomado posesión- por, aseguró, no implicarse en la atención a los damnificados por la explosión de un almacén ilegal de pirotecnia que causó dos muertos y más de treinta heridos.
Rueda que pidió, por parte del Gobierno central, la declaración de zona especialmente afectada por una emergencia de protección civil-algo que no había hecho cuando gobernaba su partido-defendió que la Xunta ya ha empezado a trabajar para subsanar los problemas causados por esta explosión y subrayó que los 7 millones en ayudas proceden de distintas consellerías del Gobierno gallego.