Dos sujetos han sido detenidos por agentes de la Policía Local acusados de ser los autores de sendos delitos de violencia machista, cometidos en Vigo en los dos últimos días.
El primero de ellos D.A.S.A, un individuo de 28 años de edad, vecino de la ciudad, que fue arrestado alrededor de las 7 y media de la tarde de este domingo en Travesía, después de que una vecina del mismo inmueble en el que vive este sujeto llamase al 092 alertando de que “tras escuchar una fuerte discusión y gritos miró por la mirilla de su puerta, pudiendo observar en el rellano a una mujer ensangrentada y llorando.
Una patrulla se desplazó al lugar, observando manchas de sangre en el acceso a la vivienda, por lo que llamaron a la puerta siendo recibidos por el mencionado individuo. “Los agentes observaron que todo estaba revuelto en el interior, con cristales en el suelo y varias manchas de sangre en el pasillo y paredes del piso” por lo cual pidieron hablar con la mujer.
La supuesta víctima, que se encontraba en el dormitorio llorando, presentaba un corte importante en el codo del brazo derecho del que emanaba abundante sangre. La mujer, que no especificó como se había producido la lesión, “manifestó que momentos antes tras una fuerte discusión por celos, forcejeo con su pareja y ella salió mal parada”.
Debido a la herida la mujer, después de una primera asistencia por parte del personal sanitario, fue trasladarla en ambulancia al Hospital Álvaro Cunqueiro.
El sujeto corroboró que “había tenido una fuerte discusión con su pareja y que ambos se había enzarzado en una trifulca en la que se causaron lesiones mutuamente. Tras realizar estas declaraciones de manera violenta dando un fuerte puñetazo en la pared con su mano derecha, dañándose la misma”. Por todo ello se procedió a su detención.
El sábado, en la rúa O Grove
El otro caso de violencia machista se produjo el sábado, alrededor de las 3 de la tarde. Agentes de la Policía Local detuvieron a L.A.G.A, un individuo de 48 años de edad, vecino de Vigo, después de que en la Jefatura del 092 se recibieran sendas llamadas en las que dos personas indicaban que “desde las ventanas de sus domicilios escucharon gritos de socorro de una mujer, pudiendo observar ambos, que “un individuo había sacado del asiento del acompañante de un turismo a una joven, para acto seguido arrojarla a la vía pública al lado del vehículo y a continuación arrancar, para luego dar marcha atrás hacia ella, interponiéndose entre ambos, un joven que transitaba en bicicleta por el lugar”.
Los testigos manifestaron además que la mujer fue caminando en dirección a la rúa O Grove, por lo que los policías hicieron el mismo recorrido a pie para intentar alcanzarla. Poco después localizaron en el interior de una cafetería en la rúa Estrada, a la mujer, que “se encontraba sola con la ropa llena de tierra y sollozando”, por lo que tras dirigirse hacia ella observaron que presentaba hematomas y arañazos visibles tanto en el brazo como en el hombro derecho.
Tras calmarse, la mujer explicó a los policías que poco antes “su pareja la había zarandeado y arrojado del vehículo tras una discusión, así como que de manera habitual recibe malos tratos físicos, pero que nunca lo había denunciado”.
Cuando se disponían a acompañar a la víctima al exterior de la cafetería, la mujer señaló al conductor de un turismo de la marca BMW 320, como su pareja -el cual se encontraba en dicha calle tratando de estacionar- “dirigiéndose la mujer hacia él reprochándole lo que había hecho”, ante lo cual los agentes lo detuvieron al momento.