A partir del 1 de septiembre de 2018 ya no se podrán producir ni vender bombillas halógenas que hayan sido fabricadas después del 31 de agosto. Desde el otoño de 2009, las fuentes de luz ineficientes desde el punto de vista energético han ido desapareciendo gradualmente del mercado, de acuerdo con la directiva europea, para favorecer el uso de tecnologías LED más eficientes y sostenibles.
¿Cuáles son las bombillas que desaparecerán del mercado?
La prohibición cubre las populares bombillas halógenas clásicas que generalmente están hechas de cristal, emiten luz omnidireccional, tienen casquillo E27 ó E14, así como algunas bombillas no direccionales con casquillos G4 y GY6.35. No obstante, pasará algún tiempo antes de que los consumidores noten los efectos de la prohibición, ya que los distribuidores podrán vender los stocks almacenados hasta fin de existencias. Por lo que aún hay tiempo suficiente para que los hogares españoles actualicen su iluminación pasándose a la bombilla LED.
La bombilla LED como alternativa a la prohibición de la halógena.
El adiós a las bombillas halógenas significa que, a partir del próximo otoño, los consumidores deben replantearse sus compras y optar por el gran número de alternativas LED que hay disponibles en el mercado, cuyo aspecto es similar al de las halógenas, pero más eficientes: las novedosas bombillas LED equipadas con la última tecnología de filamentos son un buen ejemplo de ello, ya que se pueden utilizar como reemplazo directo de las antiguas bombillas halógenas.