El hispano-estadounidense Pablo Ibar- sobrino del mítico boxeados Urtain- acusado de un triple asesinato cometido en Florida en 1994, fue declarado hoy “culpable”, por un jurado de Fort Lauderdale- al norte de Miami– de los seis cargos de los que se le acusaban.
El jurado acordó, por unanimidad, que Ibar era culpable de tres delitos de asesinato en primer grado, además de robo y robo a mano armada, por la muerte a tiros y por la espalda de Casimir Sucharski, dueño de un club nocturno, y de Sharon Anderson y Marie Rogers.
El fiscal volvió a pedir para Pablo Ibar la pena de muerte- lleva 25 años en prisión y ha pasado 16 de ellos en el corredor de la muerte– y ahora será el juez Dennis Bailey el que dicte sentencia.
Aunque durante el juicio, el cuarto que se seguía contra el acusado, se han desvelado graves irregularidades y puntos oscuros, como que no hubiese ADN de Ibar en la escena del crimen, que los especialistas asegurasen que él no es quien sale en el vídeo de los asesinatos , las importantes contradicciones y negligencias en que incurrió el detective encargado de la investigación, Paul Manzella, o el borrado de otras dos cintas de imágenes por parte de la policía, el jurado no tuvo dudas.
El abogado principal de Ibar, Benjamin Waxman, que lleva el caso desde hace casi 14 años, ha anunciado que apelará la sentencia mientras que otro de los miembros de su equipo legal adelantó que solicitarán para Pablo la condena de cadena perpetua y no la pena de muerte.