Según los únicos datos que han trascendido de la autopsia, Julen murió el mismo día que cayó al pozo en Totalán. El cuerpo del niño de 2 años presentaba un fuerte traumatismo craneoencefálico. Además, tenía politraumatismos propios de una caída de una altura de 71 metros.
El Juzgado de Instrucción número 9 de Málaga es el encargado de investigar las causas y señalar las posibles responsabilidades de la muerte del pequeño. En este momento, apuntan desde el ámbito judicial, no hay elementos contrastados como para saber si hubo negligencia.