Al menos, 290 personas han muerto y otras 500 resultaron heridas de distinta gravedad en la ola de atentados de este domingo pasado en Sri Lanka. Artefactos explosivos de gran potencia detonaron en tres iglesias cuatro hoteles y un complejo residencial.
En total, se produjeron 8 explosiones: seis simultáneas a las 08.45 en tres hoteles de lujo en Colombo y en una iglesia de la capital, otra en Katana, en el oeste del país, y la tercera en la oriental ciudad de Batticaloa.
Horas después, hubo una séptima explosión en un hotel de Dehiwala, a unos diez kilómetros al sur de la capital, y la última en un complejo residencial, también en Colombo.
Sri Lanka se encuentra todavía en estado de shock después de la serie de explosiones del domingo pasado, que dejan ya 290 víctimas mortales y más de 500 heridos. #SriLanka pic.twitter.com/b7hGhqZNtZ
— CGTN en Español (@cgtnenespanol) April 22, 2019
A ellas hay que sumar la detonación controlada de un noveno artefacto localizado en las proximidades del principal aeropuerto internacional del país. La policía de la capital informó de la detención de 24 personas relacionadas con los atentados.