Se desconoce quienes asesinaron y decapitaron en la aldea de Nola, en la República Centroafricana, a la misionera española Inés Nieves Sancho, de 77 años de edad, perteneciente a la congregación francesa de les Filles de Jesus de Massac.
Según informa ‘L’Osservatore Romano’, el cadáver de la monja apareció “horriblemente mutilado”, el lunes en la habitación donde enseñaba costura en esta aldea cercana a la frontera con Camerún.
El obispo de la diócesis de Bangassou, Juan José Aguirre, declaró que “personas indeseables” entraron en la habitación de la misionera, “la sacaron de la cama” y el lunes “la descubrieron casi decapitada”. “No se sabe por qué”. Inés Nieves llevaba 26 años trabajando en el país.