La ultraderecha sólo llegará a acuerdos con Partido Popular y Ciudadanos si forma parte de los gobiernos autonómicos y locales en los que sea necesaria la unión de las tres fuerzas para evitar que gobierne la izquierda.
Así lo aprobó la dirección de Vox, lo cual implica que en ayuntamientos como el de Madrid-donde las pasadas Elecciones Municipales las ganó Manuela Carmena- el alcalde sería José Luis Martínez-Almeida, candidato del Partido Popular-que logró 15 ediles- únicamente en el caso de que el cabeza de lista de Vox Ortega Smith-que consiguió 4 concejales-, entrase en el gobierno local junto con Begoña Villacís, de Ciudadanos- que obtuvo 11 asientos en la Corporación.
Esta pretensión de la derecha extrema choca contra las declaraciones de los últimos días por parte de responsables y dirigentes de Ciudadanos que han reiterado, en distintos foros y a varios medios de comunicación, que rechaza formar tripartitos en los que esté Vox.