Los trabajadores de Vitrasa, a través de su Comité de Empresa, expresen la “preocupación que nos causa el nuevo carril bici que está incorporando el Concello, nos preocupa sobremanera, concretamente, la zona de Camelias, Pizarro y Travesía que son compartidas con la circulación de autobuses, ya que entendemos escasas las medidas de seguridad en estas zonas de su trazado”.
Esta preocupación fue compartida mediante sendos escritos enviados al Concello y a Vitrasa “y estamos a la espera de una valoración”.
Esta circunstancia ha sido puesta de manifiesto en una nota en la que los trabajadores adelantan que están dispuestos a retomar las medidas de presión que suspendieron hace un año, después de que la mayoría de sus reivindicaciones no fuesen resueltas por la empresa.
Atrasos por las obras
El Comité recuerda que en octubre de 2018 Vitrasa se comprometió a solucionar, “de manera inmediata” los problemas derivados de los atrasos ocasionados por obras, a realizar una remodelación de los tiempos de recorrido y asegurar descansos para las conductores en todas las líneas, “un año después seguimos esperando estas mejoras”.
Eventualidad
“Seguimos teniendo un serio problema con la eventualidad”, aseguran, a pesar de que el año pasado de realizaron contrataciones de personal indefinido, “la plantilla de Vitrasa realiza horas extra suficientes para contratar al menos a una treintena de conductores, puestos que reiteradamente se van cubriendo por personal eventual en rotación teniendo a estos trabajadores 6 meses en plantilla y mandándolos a su casa durante aproximadamente un año para evitar hacerlos fijos y contratando en su lugar nuevos eventuales”.
Baños
Únicamente se colocó un wáter químico en una cabecera de línea a pesar de las promesas de solución a este problema. “En este punto debemos hacer partícipe al Concello que en su día se comprometió a la colocación de al menos una decena de baños en los puntos más necesarios, para, en la próxima concesión exigir a la empresa entrante la colocación en el resto de lugares necesarios sin tener, a día de hoy, noticias por su parte”.
Registro de jornada
Un nuevo “gran problema” al que se enfrentan los trabajadores es el registro diario de jornada, ordenado a inicios de verano. “Vitrasa niega la posibilidad de cobrar el tiempo trabajado de más a los trabajadores del turno de mañana, en el caso de que estos se retrasen en la entrega del servicio al trabajador de tarde”, denuncian.
Asimismo, concluyen, el personal que por la noche termine el servicio retrasado tiene que solicitar por escrito el abono de ese tiempo trabajado de más a pesar de quedar reflejado en un ordenador por el personal de inspección la hora de salida del personal por la noche.