El número de niños cuyo nacimiento se registra de manera oficial ha aumentado de manera significativa en todo el mundo; sin embargo, 166 millones de niños menores de 5 años, o lo que es lo mismo, 1 de cada 4, siguen sin estar inscritos en ningún registro.
Según Birth Registration for Every Child by 2030: Are we on track? (Registro de nacimiento para cada niño en 2030: ¿vamos por el buen camino?), el informe que lanza UNICEF coincidiendo con el 73 cumpleaños de la organización, la proporción de niños menores de 5 años registrados a nivel mundial ha pasado del 63% de hace 10 años, al 75% actual.
“Hemos recorrido un largo camino, pero demasiados niños siguen cayendo por las brechas del sistema. No son contabilizados y no cuentan”, explica Henrietta Fore, directora ejecutiva de UNICEF. “Un niño no registrado al nacer es invisible: no existe a ojos del gobierno ni de la ley. Sin una prueba de identidad, a menudo los niños son excluidos de la educación, de la atención sanitaria y de otros servicios fundamentales, y son más vulnerables frente a la explotación y el abuso”.
Incluso aunque un niño sea registrado, la posesión de un certificado de nacimiento es menos común, por lo que 237 millones de niños menores de 5 años –algo más de 1 de cada 3- carecen de una prueba oficial de registro.
En Birth Registration for Every Child by 2030, UNICEF reclama cinco medidas para proteger a todos los niños: proporcionar a cada niño un certificado al nacer; autorizar a todos los padres, independientemente de su género, a registrar a su hijo al nacer; vincular el registro al nacer a otros sistemas, para facilitar el derecho de cada niño a servicios sanitarios, sociales, educativos y de protección; invertir en soluciones tecnológicas seguras e innovadoras para facilitar el registro de nacimiento e involucrar a las comunidades para que sean estas las que demanden un registro de nacimiento para cada niño.
“Cada niño tiene derecho a un nombre, a una nacionalidad y a una identidad legal, así que cualquier mejora para aumentar los niveles de registro es una buena noticia”, asegura Fore. “Pero, justo cuando hemos celebrado el 30 aniversario de estos derechos, recogidos en la Convención sobre los Derechos del Niño, no debemos parar hasta que cada niño esté contabilizado”.