La alcaldesa de Mos pretende que los vigueses paguen el transporte público y el suministro de agua para el ‘macrocentro comercial’ que el Celta proyecta levantar en aquel Concello.
Así lo ha asegurado este martes la concelleira de Urbanismo, María Xosé Caride, en una rueda de prensa en la que ha adelantado la presentación de alegaciones a la reforma del Plan Xeral de Mos para construir el que ha calificado de “mayor centro comercial de toda la provincia de Pontevedra”.
Caride ha indicado que lo que los responsables del Celta quieren levantar en Mos no es una ciudad deportiva sino “un gran centro comercial, de 135.000 m2, que al lado lleva unos ‘campiños’ de fútbol” algo que, a juicio de los responsables y técnicos municipales vigueses sería “lesivo” para el comercio de la ciudad.
Usar el transporte público de Vigo
La concelleira, tras subrayar que el sería centro comercial, no los campos o la actividad deportiva, el que generase el 96% de los desplazamientos a la zona en la que se quiere emplazar este proyecto, señaló el hecho de que el mismo cuente para los desplazamientos con el autobús urbano de Vigo, sin siquiera haberse puesto en contacto o consultado con el Concello vigués, “es más, indica que sería necesario aumentar la frecuencia de los autobuses”, algo inaudito considerando que no se ha consultado con Vigo.
Más agua de Eiras
En el mismo sentido, el proyecto contempla que el suministro de agua hacia esta zona comercial salga de la presa de Eiras, “sin que el Concello de Mos tenga o haya planteado acuerdo o convenio alguno con Vigo” para contar con este servicio de abastecimiento.
Incumple la ley
A todo ello se suma, remarcó la concelleira, el hecho de que, a juicio de los técnicos municipales, el procedimiento aprobado por el Gobierno municipal de Mos no cumple con los requisitos legales. En primer lugar, al suponer la creación de una superficie comercial que es superior a toda la superficie comercial prevista en el Plan Xeral de Mos, debería de haberse planteado una reforma de dicho Plan General y no una simple modificación.
En el mismo sentido, se da la circunstancia de que este proyecto es obra, íntegramente, de una entidad particular, el Celta-“que no es ni dueño de los terrenos”-, y no han intervenido en su planteamiento y desarrollo técnicos municipales de Mos.
Finalmente, plantea la creación de una nueva carretera, “en una zona de alta accidentabilidad” -la ‘autovía’ Vigo-Porriño-, una actuación que tiene un “informe desfavorable del Ministerio de Fomento” y que por tanto no podrá realizarse tal y como se plantea.