El alcalde señalará, en pocos días, el momento en el que ya no será posible pagar el billete de Vitrasa en efectivo. La medida, que se toma para reducir al máximo la posibilidad de contagio de las conductoras y conductores– y que ellos mismos habían reclamado-se pondrá en marcha “próximamente”, aseguró este martes el alcalde sin dar una fecha exacta.
Para poder realizar el pago se colocará una “maquina de validación” en la puerta central del autobús en la que habrá que realizar el pago con tarjeta. ¿Que tarjeta?…en realidad es más que una, puesto que podrá usarse la PassVigo y también otra que, a este efecto, podrá solicitarse a Vitrasa una vez que la concesionara ponga en marcha un sistema para expedir las mismas de manera que lleguen a los usuarios “un par de días” después de haberlas solicitado.
Junto a esta medida se pone en marcha otra: la obligatoriedad de subir al autobús por la puerta central del mismo, otra de las peticiones de los empleados de Vitrasa, de modo que “ya no habrá posibilidad de acceder por la puerta delantera, cercana al conductor”.
A ello se suma que en los buses-cuya ocupación ha caído en Vigo un 92%– no podrán viajar más de las personas que cubran el 30% de la capacidad del mismo, siempre separadas por 1 metro de distancia y dejando, entre ellas, un asiento libre.
Dos autobuses ‘pegados’ a los hospitales
De manera inmediata, adelantó Abel Caballero, se “refuerzan” las líneas que van a los hospitales Cunqueiro y Meixoeiro: el trayecto será cubierto por dos vehículos, un primero de los de tipo ‘oruga’ y, justo detrás, un segundo autobús, que garantizará que se recoge a todos los viajeros y que, una vez dentro, mantienen la distancia de seguridad para evitar el contagio.
