El Juzgado de lo Contencioso-administrativo número 2 de Vigo ha anulado otra multa impuesta durante el confinamiento.
En este caso, el denunciado fue un hombre que caminaba el 28 de marzo sobre las tres y media de la tarde por Camelias. Al ser interceptado por agentes de la Policía Local, les informó de que se dirigía a una farmacia porque las más cercanas a su vivienda estaban cerradas.
No hay rastro de requerimiento por parte de los agentes que fuese cuestionado
El juez subraya que “no hay rastro de que por parte de los policías se le hubiese dirigido requerimiento alguno al denunciado que hubiese sido cuestionado”, por lo que concluye que no existe delito de desobediencia. Por ello, decreta la anulación de la sanción de 601€.
Acreditó una compra en la farmacia
El titular del Juzgado de lo Contencioso-administrativo número 2 de Vigo, no obstante, señala que el vecino de Vigo acreditó una compra en la farmacia de la Ronda de Don Bosco, que es a la que le conminaron a ir los agentes por ser la más próxima a su domicilio.
“Aunque no hubiese acudido a esa farmacia, sino a otra, no detectamos delito en su conducta”, recalca el juez. Asimismo, añade, el justificante de la compra “solo sirve para corroborar la plena obediencia del recurrente al mandato de los agentes que lo han denunciado, su total colaboración y disposición a aceptar su requerimiento y, en suma, la ausencia de cualquier renuencia a acatar sus órdenes”.