Julio de 2015, el alcalde y el entonces presidente de la Diputación de Pontevedra, Rafael Louzán, firman en el centro del césped de Balaídos un acuerdo para reformar el estadio municipal.
La inversión sería de algo más de 30 millones y el estadio estaría completamente reformado para la temporada 2017-2018. El Concello pondría 15 millones, la Diputación otros 15 y el Celta se haría cago de la grada de Preferencia.
De 30 a 43 millones y de 3 a 10 años de obras
La realidad no se parece mucho a aquel proyecto. El precio se ha incrementado en un 43% y el plazo para que el estadio esté acabado ha pasado de la temporada 2017-2018 a la 2024-2025, tras casi una década de obras.
En total, la grada de Gol se acercará a los 17,8 millones de inversión; la de Río 5,2; Marcador 16,6 , más lo invertido en Tribuna , supera los 43 millones.