El pasado 28 de mayo,en un dispositivo preventivo de alcohol y drogas establecido en el PK. 6,300 de la PO-532, una patrulla del Destacamento de Tráfico de la Guardia Civil de Pontevedra dio el alto a un vehículo. Pese a las indicaciones de los agentes, el conductor hizo caso omiso, por lo que se realizó un seguimiento, detectándolo en la carretera EP-0004. Al darle nuevamente el alto realizó una maniobra brusca “con intención de atropellar a uno de los guardias civiles y se dio a la fuga”.
Se presentó en las dependencias de la Guardia Civil
Tras realizar varias investigaciones para localizar a este conductor, éste se presentó, dos días después, en las dependencias del Subsector de Tráfico de la Guardia Civil de Pontevedra, acompañado de su abogado. El individuo, resultó ser un vecino de Barro de 23 años al que, tras leerle sus derechos, se le instruyeron diligencias por un delito de atentado contra agente de la autoridad y por otro contra la Seguridad Vial por conducir un vehículo tras perder todos los puntos del carné.
A disposición judicial
La causa y todo lo investigado se pusieron a disposición del Juzgado de Guardia de Pontevedra que, si le considerará culpable del delito de atentado podría imponerle una pena de prisión de 3 años y un día a 4 años y medio. Por el delito contra la seguridad vial se enfrenta a pena de prisión de 3 a 6 meses, multa de 6 a 12 meses o trabajos en beneficio de la comunidad de 31 a 90 días, así como la privación del derecho a conducir vehículos a motor y ciclomotores por tiempo superior a uno y hasta cuatro años.
