Ayer el alcalde anunció que no habrá hogueras de San Juan y hoy que no se abrirán las piscinas de Samil. En ambos casos, Abel Caballero responsabilizó a la Xunta.
En el primero por no haber cambiado la norma y permitir que pudieran plantarse las hogueras, en el segundo por sus ‘medidas draconianas’ para abrir las piscinas públicas.
Los mismos argumentos que Salvaterra, Tui, Salceda y Mondariz
Caballero utilizó los mismos argumentos expuestos hace unos días por los alcaldes de Tui y Mondariz y las alcaldesas de Salvaterra y Salceda: “las condiciones de la Xunta lo hace imposible”.
Exactamente, apuntó, el tener que realizar controles de aforo, en la entrada y salida, además de las exigencias de limpieza impiden, “de hecho” que se abran las piscinas de Samil.
“Pautas propias” para Vigo
Tras enfatizar que Vigo tiene una incidencia del COVID, a 7 días, de sólo 12 casos por cada 100.000 habitantes, pidió a la Xunta que aprobase “pautas propias” para la ciudad, distintas a la del resto de Galicia.
Caballero insistió en que él quería que hubiese hogueras, repitió que Vigo está “entre las tres mejores ciudades de España con más de 250.000 habitantes” en incidencia acumulada y exigió a Sanidade que dé “rienda suelta y capacidad de actuar a la hostelería” y que “no nos vengan con cuentos de la China”.
Cambios el martes
El alcalde hizo estas declaraciones poco después de que el presidente Sánchez anunciase que desde el próximo día 26 las mascarillas dejarán de ser obligatorias en espacios exteriores. Una medida que se sumará a otras de ‘flexibilización’ que tomará el Gobierno de Galicia el próximo martes.
