Agentes de la Policía Local acudieron a las 01:30 horas de la madrugada del día de ayer a un hotel de Vigo, alertados por su recepcionista avisando de que “se estaban produciendo gritos en una de las habitaciones y que no respondían a las llamadas”.
Gritos
Una patrulla se desplazó al lugar pudiendo escuchar los policías, tras la puerta, “fuertes golpes, conversaciones sin sentido y a una mujer pidiendo auxilio”.
Los Agentes llamaron de forma insistente a la puerta y nadie se acercó a abrir, por el contrario se escuchaban gritos cada vez más fuertes.
En vista de que se podía estar produciendo un delito o un inminente
peligro, pidieron al recepcionista la apertura de la puerta con una llave
maestra. Tras la apertura, “vieron a una mujer en el suelo dando vueltas y golpeándose contra los muebles, pidiendo auxilio y realizando movimientos incoherentes, manifestando frase sin sentido”.
Por otro lado, en la cama, había un hombre acostado, “completamente
abstraído, fuera de si, inmóvil, muy pálido, no pudiendo articular palabra”.
De inmediato, se alertó a una ambulancia medicalizada cuyo personal indicó que ambos jóvenes, de 20 y 21 años de edad, “pudieran estar
gravemente influenciados por algún tipo de sustancia alucinógena”, por lo que fueron trasladados al Hospital Álvaro Cunqueiro de forma inmediata.