A la vista de las declaraciones de hoy del alcalde, no parece que haya a la vista una reunión con el presidente de la Xunta. Abel Caballero aseguró hoy que la última vez que se vieron, en 2015, “me engañó…hizo todo o contrario de lo que dijo”.
‘Pruebas’ de su buena voluntad
Para volver a sentarse con Feijóo, el alcalde le exige ‘pruebas’ de buena voluntad, entre ellas la retirada del recurso contra el Área Metropolitana o que la Xunta asuma el gasto de un autobús a Peinador, “como hace con el aeropuerto de Santiago”.
“No va a hacer nada”
Caballero está convencido de que “Feijóo no va a hacer nada por esta ciudad” y ha repetido que se opone a la autovía a Porriño por túnel; que no le gustan las luces de Navidad de la ciudad o, recordó, criticó la calidad del agua de Vigo.
“Ojalá atendiese a Vigo…si lo hiciese le pongo la alfombra roja”, afirmó el alcalde quien recalcó que sólo se reuniría con el presidente “si va en serio y hay pruebas de que hace cosas [en la ciudad]”.
De “calumniador” a “ridículo”
No es una novedad: a Abel Caballero no le gusta Feijóo…aún más, cree que está detrás de muchos de los problemas y carencias de Vigo, algo que le achaca a diario.
En las últimas semanas, el alcalde ha calificado al presidente de “ridículo”, “patético”, “mentiroso”, “calumniador” o “indigno”; le ha culpado de que las Cíes no sean Patrimonio de la Humanidad; de que intentar paralizar la economía de Vigo, la Autovía a Porriño, la Biblioteca del Estado, la construcción de viviendas, el AVE por Cerdedo, las rampas de Gran Vía o el aeropuerto de Peinador.
Feijóo tiene la culpa de todo
Para Abel Caballero, Feijóo también tiene responsabilidad en el aumento de los casos de COVID, en que los vigueses tengan que pagar los Centros de día, en que la Xunta no aporte dinero para las escuelas infantiles, tampoco para el albergue.
El presidente también habría detenido la reforma de Samil; la construcción de un instituto en Navia; influido para que aumente el recibo del agua y de la recogida de basura en Vigo; se negaría a ayudar en los desahucios; no querría acabar con la incompatibilidad del RISGA y el Ingreso Mínimo Vital; se ‘quedaría’ con el dinero que manda el Gobierno a Galicia; estaría ‘haciendo caja’ con la Sanidad y la Política Social; ha causado los problemas de la hostelería y el comercio o da dinero al Xacobeo pero no a las fiestas de Vigo.