Poco antes de las 10 y media de la noche del pasado martes, 31 de mayo, la Policía Local de Vigo recibió una llamada en la que una persona informaba de que había visto a un individuo rompiendo el retrovisor de un coche y entrando en un edificio.
Amenazas de muerte
Hasta el lugar se desplazó una patrulla cuyos integrantes oyeron gritos procedentes del inmueble y a un sujeto “profiriendo amenazas de muerte”.
Inmediatamente entraron en el portal y se dirigieron hacia la vivienda de donde procedían los gritos y les abrieron la puerta dos mujeres que “estaban muy nerviosas y llorando”.
Heridas
Una de ellas, de 78 años de edad, tenía “marcas y rojeces en el cuello” y la otra, de 81 años, “una gran hinchazón en el lateral de la cabeza, un hematoma en la nariz, otra en el dedo corazón y sangre por la comisura de la boca”.
Pegó a su abuela y a la hermana de ésta
El individuo que vivía con ellas, P.V.D.R., de 31 años, se había presentado en el domicilio minutos antes muy alterado, desconociendo el motivo de tal actitud. A la vista de su conducta, las dos mujeres decidieron encerrarse en una habitación, “echando el hombre la puerta abajo, y comenzando a agredir a la primera de las identificadas, su abuela”.
La otra mujer, su tía abuela, trató de evitar la agresión, convirtiéndose en el objetivo de la ira del hombre, que la tiro sobre la cama comenzando a golpearla a puñetazos, momento de la llegada de los policías. “Aterradas, les comentaron a los agentes que de si hubiesen llegado más tarde las habría matado”.
Agresión a la Policía
El supuesto agresor se mostró “desafiante, comenzando a amenazar a los policías, levantándose súbitamente y dando una bofetada uno de ellos”.
Ante esta actitud, procedieron a su inmediata inmovilización, lo esposaron y lo arrestaron acusado de la comisión de un Delito de Malos Tratos en el Ámbito Familiar, con el agravante de Atentado a la Autoridad.
