46.000 confiesan que han llegado a circular por encima de los 200 km/h
Permitir a un menor conducir por encima de los 160km/h mientras su padre graba la imprudencia, sobrepasar los 220km/h en autopista o realizar un adelantamiento en una curva a gran velocidad son solo algunos de los casos más llamativos de temeridades reales al volante por exceso de velocidad. Pero no son los únicos.
Incumplimiento habitual
La realidad es que la velocidad sigue siendo un gran problema para la seguridad vial en España, ya que el 48% de los conductores gallegos reconoce que incumple habitualmente los límites, una tendencia que cada vez va a más. Además, una parte importante de los automovilistas aún no han desterrado los comportamientos temerarios cuando se ponen al volante.
46.000 confiesan haber circulado a más de 200km/h
46.000 gallegos confiesan que ha llegado a circular por encima de los 200 km/h en vía interurbana y 122.500 que lo han hecho a más de 100 km/h en ciudad. O dicho de otro modo: más de 168.500 gallegos podrían haber cometido un delito contra la seguridad en el tráfico sin saberlo.
4.500 muertos
Estos comportamientos tienen una consecuencia alarmante: en la última década se registraron en España más de 100.000 siniestros por imprudencias relacionadas con la velocidad que causaron más de 150.000 víctimas y casi 4.500 muertos. Además, 1 de cada 4 fallecidos en carretera murieron por un exceso de velocidad, una conducta muy peligrosa que multiplica por siete el riesgo de morir como conductor en caso de accidente.
Estas son algunas de las conclusiones del estudio “Velocidad, la lacra silenciosa. El exceso de velocidad en los accidentes mortales en España (2011 – 2020)”, elaborado por la Fundación Línea Directa en colaboración con el Instituto de Tráfico y Seguridad Vial de la Universidad de Valencia (INTRAS).
El informe pone el foco en la velocidad como uno de los factores más habituales y letales en los accidentes de tráfico, para advertir sobre sus riesgos y efectos y concienciar a la sociedad española de la gravedad de determinados comportamientos.
Una práctica muy extendida
Según palabras de Mar Garre, Directora General de la Fundación Línea Directa “las infracciones de velocidad constituyen una práctica muy extendida y de gran riesgo que, cada año, se cobra la vida de cientos de personas en nuestras carreteras. Por eso, debemos ser especialmente prudentes de cara a la inminente Operación Salida para evitar un “efecto euforia” en el primer verano sin restricciones desde 2019”.
Podrían salvarse más de 650 vidas al año
La ONU, en su objetivo de reducir al 50% el número de accidentes en 2030, recomienda bajar los límites de velocidad en 20 km/h en vías interurbanas. En este sentido, la Fundación Línea Directa y el Instituto de Tráfico y Seguridad Vial han calculado cuántas vidas salvaría la medida, utilizando para ello el modelo de potencia de Nilsson, un sistema de cálculo muy riguroso y especialmente eficiente en entornos interurbanos. Para ello, se han tenido en cuenta los datos oficiales de la DGT, los accidentes producidos por no respetar los límites y el carácter agravante de la velocidad en todo tipo de accidentes.
La conclusión del ejercicio es muy interesante, ya que bajar los límites de velocidad 20 km/h respecto a los actuales reduciría un 70% el número de fallecidos en vías interurbanas, lo que equivaldría a salvar 659 vidas al año en España.
El 44% de los gallegos a favor de elevar el límite de velocidad
Sin embargo, la idea de endurecer las normas en este ámbito sigue dividiendo a la opinión pública, ya que no todos los automovilistas están a favor. Según el estudio, el 44% de conductores gallegos optaría por elevar los límites en autopistas y autovías porque los actuales son “poco realistas” y 88.400 los quitaría directamente.
Así son los accidentes de velocidad
Al realizar la radiografía del accidente causado por velocidad, cabe diferenciar los ocurridos en carretera y los sucedidos en ciudad. En vías interurbanas se producen principalmente por salida de vía por la derecha, en el último trimestre del año y en fin de semana.
Por lo que se refiere a los ocurridos en vías urbanas, suelen suceder más en enero y se producen mayoritariamente accidentes frontolaterales, por alcance y atropellos. Además, destaca especialmente la antigüedad del vehículo accidentado, superior a la media española.
El perfil del conductor accidentado suele ser un hombre joven (de entre 18-34 años), que se encuentra de vacaciones o en su tiempo de ocio y que usa menos el casco o el cinturón de seguridad.
¿Qué opinamos los gallegos?
La Fundación Línea Directa también ha querido conocer la percepción de los ciudadanos sobre la normativa de velocidad y sus hábitos al volante a través de una encuesta realizada a 1.700 personas. Una de las conclusiones más llamativas es que solo el 8,2% de los conductores gallegos conoce los límites de velocidad para turismos y motos.
En cuanto a la proporción de conductores que superan los límites de velocidad, el estudio de la Fundación Línea Directa concluye que el 43% de los conductores circulan habitualmente por encima de los límites y el 7% de los españoles infringen casi siempre las normas en este ámbito.
Las comunidades con más infractores son Castilla-La Mancha, La Rioja y Aragón. En el lado contrario, se sitúan Canarias, Región de Murcia y Baleares. Galicia se encuentra por encima de la media estatal, con un 8%.
En lo referente a las sanciones, el 65% de conductores gallegos no cree que la finalidad de las multas sea exclusivamente la seguridad vial, mientras que más 59.000 está a favor de despenalizar los límites de velocidad. Además, el 47% respalda la idea de situar los radares exclusivamente en los Tramos de Concentración de Accidentes (TCA) o en puntos peligrosos.