Miles de personas llenaban ya Castrelos muchas horas antes de que Alejandro Sanz (Madrid, 1968) empezase el concierto. Las 5.000 entradas para la platea se agotaron en minutos el día que salieron a la venta y las gradas del anfiteatro se ocuparon casi a la misma velocidad…hasta varios incondicionales acamparon en el parque para coger un sitio pegado al escenario.
“Vigo, entonces qué?” ese fue el mensaje que el cantante colgó en su cuenta de Twitter cinco horas antes de empezar a cantar. Ese fue su saludo para todos los que estaban ya esperando o iban de camino a la tercera visita del artista a la ciudad.
La primera fue en 2001, en Balaídos: más de 15.000 personas llenaron el estadio para corear su ‘Alma al aire’…muchas de ellas volvieron hoy. También estuvieron en 2010 a Ifevi. Fue un 22 de mayo, con su gira Paraíso Tour. Han pasado más de 20 años y el músico es ya una leyenda: premios Grammy-24 latinos y 4 universales- decenas de millones de discos vendidos, 30 años de carrera y una nueva gira: ‘En Vivo 2023’.
Todos hemos cambiado y algo sigue igual: la pasión que transmite y la entrega sin reserva de sus seguidores que no han dado un segundo de tregua, cantando, aplaudiendo y gritando. “Qué maravilla estar aquí”, comentó desde las tablas…antes de volver a hacer historia, deteniendo el tiempo con “No es lo mismo”, “Desde cuando”, “quisiera ser” o “Lo que fui es lo que soy”. Pues eso.
