La asociación de vecinos Zona Centro se ha mostrado muy crítica con las novedades anunciadas por el Gobierno local en realación con las atracciones de Navidad y el ‘mercadillo’. Lamentan que no se haya escuchado su opinión para “evitar la tortura”, que ha supuesto el ruido estos últimos años y recuerdan que, al margen de las fiestas navideñas, el propio Concello declaró las calles donde residen como Zona Acústicamente Saturada.
Insuficiente
Así, opinan que esas medidas, “que dicen haber adoptado para que suframos menos las consecuencias de la instalación del Cíes Market nos parecen totalmente insuficientes“. Insisten en que la instalación de un mercadillo durante meses en la Alameda, donde principalmente se vende comida y alcohol, “nada tiene que ver con la Navidad”. Además, subrayan, es totalmente incompatible con la sostenibilidad, seguridad y salud del barrio y de quienes viven y trabajan en el mismo.
“Obcecación”
Asimismo, en lo que se refiere a la instalación de la Noria y otras atracciones de feria en Areal, “a escasos metros de la viviendas”, muestran su total desacuerdo con la “obcecación” de mantenerlas “delante de nuestras casas, trabajos y negocios”. Insisten en que “esto no dura un fin de semana, dura 3 meses” y hace “insoportable” el día a día a quienes viven y trabajan en esas calles que, insisten, sufren un “calvario”.
No se respetan ni las medidas antiruido ni los horarios de cierre
En lo que se refiere al resto de las medidas anunciadas, como la prohibición de usar las bocinas, sirenas o melodías, desde la Asociación Zona Centro señalan que “esto ha estado siempre prohibido y ningún año lo han respetado. De la misma forma que tampoco se han respetado nunca los horarios de cierre”.
Lo mismo sucede, dicen, con los altavoces que se sitúan a escasos metros de las fachadas, “también el año pasado se prometió bajar el volumen y lo hacían según les convenía”, apagándolos incluso cuando estaban haciendo mediciones de ruido. “Es un horror vivir durante semanas con música que se mete en nuestras viviendas durante horas y horas y consideramos que deberían estar totalmente prohibidos“, explican.
Plan de Autoprotección y de Movilidad
A la vista de todo ello, los vecinos exigen al Concello que de modo urgente haga público el Plan de Autoprotección y el de Movilidad, que “deben de garantizar la seguridad, salud y movilidad de los residentes de estas calles, exactamente igual que se garantiza para cualquier vigués que viva en otro barrio”.
Por ello, advierten de que “con nuestra salud y seguridad no se juega. Especialmente la de nuestros mayores, niños pequeños, enfermos y dependientes” y adelantan que ejercerán, hasta la última instancia, las acciones legales que correspondan
“Tanto judiciales como administrativas; en materia de ruido; sanidad; seguridad; patrimonio y medio ambiente”, instando el reconocimiento de que ningún interés económico por importante que sea, está por encima de los Derechos Fundamentales.
