El alcalde ha visibilizado hoy la celebración del ‘Día Mundial del Árbol’ haciendo una plantación simbólica en la Vía Verde. Antes, en una nota de audio enviada a los medios de comunicación, ha reivindicado el haber convertido a Vigo en la “ciudad de los árboles”.
Así, ha recalcado que desde que accedió a la Alcaldía -en junio de 2007- se han plantado en la ciudad más de 30.000 árboles -alrededor de 6 al día- y sólo en lo que llevamos de este 2024, son ya 350, al margen de los 50 se han enraizado este jueves en la ‘Vía Verde’.
Caballero ha subrayado que a esos 30.000 árboles se sumarán los que está previsto incorporar a los 3,5 millones de metros cuadrados de zonas verdes que contemplan el Plan Xeral de Ordenación Municipal (PXOM), pendiente de su aprobación definitiva.
¿1.000 árboles menos al año en Vigo?
El alcalde no hace mención en su grabación a la demanda de la oposición para que el Gobierno municipal presente públicamente los informes que avalan que se talen 1.000 árboles al año en Vigo. Tampoco ha explicado cuál es la política que sigue con respecto al arbolado de la ciudad o ha justificado los motivos para la retirada de árboles en la Falperra o la “tala masiva” en Manuel Olivié.
Y es que la gestión de las zonas verdes, en especial cuanto se refiere al arbolado genera polémica desde hace años. Al menos en la última década, grupos ecologistas, asociaciones ciudadanas y vecinales,además de partidos políticos, han sido muy críticas con la gestión municipal.
Las demandas abarcan desde la tala en Gran Vía, pasando por la eliminación de los grandes árboles de Ronda de Don Bosco, en Samil, Vía Norte, Praza da Miñoca, Navia, Coia, Castrelos o Martínez Garrido. También se han organizado acciones en contra de los proyectos anunciados por l Concello en otros lugares de la ciudad, como el Parque de García Picher, o las parroquias de Beade, Bembrive o Sárdoma. Sin olvidar las últimas, que afectan al Castro o a la Falperrra.
Seguridad
Las respuestas de Abel Caballero a esas críticas siempre ha sido las mismas: por un lado que los árboles se talan por seguridad. Pese a que el Gobierno municipal difundió sólo una vez los informes elaborados por especialistas que avalasen esa afirmación, la caída de ramas y troncos enteros en varias ocasiones, y en diferentes lugares, reafirman la necesidad de vigilar su ‘salud’, en especial la de los ‘árboles urbanos‘.
El segundo argumento es el de hoy: su vena silvicultora, reivindicándose como el alcalde que más árboles ha plantado en la historia de Vigo, reclamando esas docenas de miles que han enraizado durante su gestión o, como ha repetido más de una vez: “de los casi 12.000 árboles que hay en el casco urbano, durante mi mandato se han plantado alrededor de la mitad”.
