En el transcurso de un control realizado por patrullas de la Guardia Civil de Tráfico, en la PO-555 (Redondela-Peinador), se dio el alto a varios camiones de gran tonelaje, dos de cuyos conductores dieron positivo en la preceptiva prueba de alcohol. El primero con un resultado de 0,27 mg/l en aire espirado y duplicando la tasa máxima permitida el segundo, al arrojar 0,39 mg/l, -el tope para este tipo de vehículos en 0,15 mg/l -.
“Los hechos suponen una infracción muy grave, con multas de hasta 1.000 € (500 € con la reducción del 50%), así como una detracción de 6 puntos de su permiso de conducción“, apuntan desde la Guardia Civil. A la vista de los resultados, se inmovilizaron ambos vehículos en el lugar hasta que desaparecieron las causas que motivaron dicha intervención.
Desde el Subsector de Tráfico de la Guardia Civil de Pontevedra, subrayan la importancia de “circular sin haber consumido alcohol o ningún tipo de estupefacientes”, especialmente en este tipo de vehículos de grandes dimensiones, que, en caso de pérdida de control del mismo, producen aparatosos accidentes con graves consecuencias.