La Asociación de Empresarios de Mos anunció hoy la presentación de una rigurosa alegación contra el diseño de la futura autovía Vigo-O Porriño A-52, “porque se trata de una infraestructura que, tal y como está proyectada, derivará indefectiblemente en el aislamiento del tejido industrial de este municipio”.
La junta directiva de Aemos, reunida para concretar la respuesta de la entidad al nuevo proyecto, recordó que la mejora de las conexiones viarias a distintos parques empresariales de Mos supone una reivindicación histórica de la asociación, “una demanda que ahora quedaría completamente anulada”.
Aumento de costes logísticos
El trazado supondría no sólo el descarte definitivo de la mejora de los accesos a varios polígonos, como los de A Veigadaña o Cebral (este último pendiente de desarrollo), sino que implicaría un importante incremento de los costes logísticos de las empresas del concello y complicaría mucho el movimiento de trabajadores.
Aemos recuerda que la mayor parte de las compañías que operan en el municipio tienen en realidad unos vínculos estrechos con Vigo, con un volumen enorme de empleados que se desplazan diariamente desde esta ciudad hasta Mos. De hecho, el eje Mos-O Porriño está considerado el pulmón industrial vigués y la localización más atractiva y deseada por la industria viguesa para su expansión.
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Gratuidad de la AP-9 entre Puxeiros y Porriño
“Obviamente -sostiene la directiva de la asociación- en Aemos estamos complemente a favor de que Vigo tenga una mejor salida directa hacia la Meseta, pero eso no puede llevarse adelante a costa de condicionar el futuro de nuestras industrias”.
Además de la mejora de los accesos a los polígonos, los empresarios defienden como una opción preferente la gratuidad del tramo de la AP-9 entre Puxeiros y O Porriño.
Seguirá usándose la peligrosa A-55
Con el actual diseño de la futura A-52, subrayan los empresarios de Mos, el tráfico pesado seguiría además condenado a continuar utilizando la compleja, sinuosa y peligrosa A-55, sin contar con que habría naves industriales a las que el nuevo trazado afectaría directamente. En este sentido, Aemos advirtió que tiene constancia de que al menos 9 empresas con una plantilla total de 250 trabajadores situadas en Sanguiñeda desaparecerían inexorablemente de la zona.
