Se trata de un recorte adicional de 1.500 millones de euros totalmente necesarios en Cataluña, explicó hoy el presidente de la Generalitat, Artur Mas.
El Gobierno catalán acaba de dar luz verde a su nuevo plan de ajuste, el tercero que aprueba en un año, y que implica una nueva reducción presupuestaria.
Las medidas de este nuevo tijeretazo: rebajar en un 5% los complementos salariales de los empleados públicos, incremento de tasas en los ciclos formativos, suspender las subvenciones o ajustes de trabajadores de empresas públicas, entre otras cuestiones.